Manu Sánchez: el rey solo
Aunque esta obra de teatro cuenta con un único actor como protagonista, ‘El Rey Solo’ deja atrás el concepto de monólogo. La mezcla de ingenio y crítica social que caracteriza a Manu Sánchez, es el mejor aval para dar solidez a esta pieza escénica que recoge las relaciones materno-filiales y el vértigo de un cambio de etapa.
«El Rey Solo. Mi reino por un puchero» es previo a los acontecimientos y nació con la vocación de hacer un teatro que perdurara en el tiempo. Pero rizando el rizo, la dramaturgia cuenta con pequeños «compartimentos» en los que cabe la actualidad, en los que recoger un guiño al espacio y al tiempo. Y a mitad de la temporada se sobrevino la abdicación del Rey Juan Carlos I y la llegada al trono de Felipe VI. Y la historia de Manu I, que ya existía, se dotó de actualidad en un importante esfuerzo de reescritura de parte de la trama por parte tanto de Manu Sánchez como su equipo de la productora 16 Escalones.
Bajo la dirección de Julio Fraga, responsable de una soprendente puesta en escena, Manu Sánchez hace uso de la música, la sátira, la ironía y el mejor humor para conseguir que el público no pase más de 30 segundos sin reir.
El reinado de Manu I está a punto de empezar. Y los súbitos-espectadores podrán vivir en primera persona cómo vive esto un futuro monarca desde la soledad de su sofá. El que va a ser rey tiene preocupaciones, disyuntivas, temores. y una madre que está siempre pendiente de su hijo.. En ocasiones, demasiado. Esta obra de teatro nos enseña cómo es un Rey en zapatillas de andar por casa y cómo se relaciona con su madre, tal y como todos nos relacionamos con las nuestras. Hay toda una realidad detrás de los discursos oficiales, detrás de los saludos reales, detrás del protocolo. Y Manu I te deja entrar en su casa para conocerla.
Y todo ello dejándose empapar por el mejor humor y sin perder ni un ápice de desmenuzamiento de la realidad.
El reinado de Manu I está apunto de empezar. Larga vida al Rey.
Aunque esta obra de teatro cuenta con un único actor como protagonista, ‘El Rey Solo’ deja atrás el concepto de monólogo. La mezcla de ingenio y crítica social que caracteriza a Manu Sánchez, es el mejor aval para dar solidez a esta pieza escénica que recoge las relaciones materno-filiales y el vértigo de un cambio de etapa.
«El Rey Solo. Mi reino por un puchero» es previo a los acontecimientos y nació con la vocación de hacer un teatro que perdurara en el tiempo. Pero rizando el rizo, la dramaturgia cuenta con pequeños «compartimentos» en los que cabe la actualidad, en los que recoger un guiño al espacio y al tiempo. Y a mitad de la temporada se sobrevino la abdicación del Rey Juan Carlos I y la llegada al trono de Felipe VI. Y la historia de Manu I, que ya existía, se dotó de actualidad en un importante esfuerzo de reescritura de parte de la trama por parte tanto de Manu Sánchez como su equipo de la productora 16 Escalones.
Bajo la dirección de Julio Fraga, responsable de una soprendente puesta en escena, Manu Sánchez hace uso de la música, la sátira, la ironía y el mejor humor para conseguir que el público no pase más de 30 segundos sin reir.
El reinado de Manu I está a punto de empezar. Y los súbitos-espectadores podrán vivir en primera persona cómo vive esto un futuro monarca desde la soledad de su sofá. El que va a ser rey tiene preocupaciones, disyuntivas, temores. y una madre que está siempre pendiente de su hijo.. En ocasiones, demasiado. Esta obra de teatro nos enseña cómo es un Rey en zapatillas de andar por casa y cómo se relaciona con su madre, tal y como todos nos relacionamos con las nuestras. Hay toda una realidad detrás de los discursos oficiales, detrás de los saludos reales, detrás del protocolo. Y Manu I te deja entrar en su casa para conocerla.
Y todo ello dejándose empapar por el mejor humor y sin perder ni un ápice de desmenuzamiento de la realidad.
El reinado de Manu I está apunto de empezar. Larga vida al Rey.
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